La Junta destina 15,6 millones de euros a la construcción de más de 45 kilómetros de carriles bici para facilitar la movilidad sostenible
La Junta de Castilla y León destina 15,6 millones de euros, cofinanciados con fondos europeos, a la construcción de más de 45 kilómetros de carriles bici para facilitar la movilidad sostenible y “fomentar el uso seguro de la bicicleta en los desplazamientos cotidianos de los ciudadanos que residen en el alfoz de algunos de los principales núcleos de población de la Comunidad», ha indicado la consejera de Movilidad y Transformación Digital, María González Corral.
Enmarcada dentro de la Semana Europea de la Movilidad, que en su edición 2023 se ha convocado con el lema ‘Ahorra Energía’ «para concienciarnos a todos los ciudadanos de que una simple elección en nuestra forma de desplazarnos puede tener un gran impacto a nivel global”, la consejera ha presentado esta mañana en Valladolid las propuestas de la Junta, dentro de las políticas para la promoción de la movilidad sostenible en Castilla y León. El presupuesto consigando para este fin se divide en un total de ocho proyectos.
El primero de ellos, ya en marcha, tiene Valladolid como lugar de actuación. Cuenta con un presupuesto de 1,3 millones de euros y se circunscribe a un tramo de 2,5 kilómetros de la VA-113, que une la capital con Santovenia de Pisuerga.
Las obras prevén encajar el carril bici en la margen izquierda de la carretera, al objeto de dar servicio a la mayoría de las viviendas, residencias y negocios y evitar el cruce de la calzada de los usuarios con origen o destino en Santovenia de Pisuerga, cuyo acceso está también situado en ese lado de la vía.
Asimismo, contemplan un ensanche de la actual calzada por la margen derecha, la ejecución del drenaje, señalización horizontal y vertical, así como el balizamiento y las defensas con barrera metálica.
El segundo, cuyas obras también han comenzado, es el de Salamanca. El proyecto recoge un carril ciclista y peatonal entre la capital salmantina y la localidad de Villamayor, con una longitud total de 1,12 kilómetros y una inversión de 457.000 euros.
En todo el tramo se adopta una sección transversal total de 5 metros, de los que 2,5 se destinarán al carril bici y 2 metros al carril peatonal. A ambos lados de los carriles se colocarán bordillos.
La plataforma se ampliará con 0,50 metros más del lado del carril peatonal hasta llegar a los 5,00 metros. Sobre la sección de la estructura existente, se reorganizan los carriles de la calzada actual, los arcenes y aceras, de forma que se pueda generar un ancho suficiente para permitir el paso del carril bici en ambos sentidos, separado del tráfico rodado.
En el caso de Ávila, el trayecto prevé la unión de la capital y la localidad de Aldea del Rey (6,77 kilómetros) mediante la construcción de una pista ciclista independiente y paralela a la carretera AV-900.
Más en concreto, el recorrido está acotado entre la explanada de acceso peatonal al parque natural El Soto, perteneciente a la ciudad, y el cruce del Camino del Molino, en las inmediaciones de la localidad de Aldea del Rey Niño, “dando continuidad a uno existente en la actualidad en la margen derecha de dicha vía y con el que se busca evitar la circulación de ciclistas por la calzada”, ha indicado la consejera. Su presupuesto es de 1,44 millones.
En Palencia, la propuesta, de 1,78 kilómetros de longitud, tiene un presupuesto de 769.000 euros y va a conectar la capital con el municipio de Villalobón a través de la carretera P-405, dando continuidad al tramo ya ejecutado por el Ayuntamiento de Villalobón a través de la ampliación del trazado de éste en dos sentidos.
Por un lado, dentro del término municipal de Palencia, hasta la intersección con la Avenida de Cuba y la Avenida de la Comunidad Europea. Y, por otro, dentro del término municipal de Villalobón, ejecutando una suerte de variante o circunvalación, de forma que dé conexión a los barrios del norte de la localidad con Palencia a través del carril bici, evitando entrar en los viales del núcleo urbano.
En la provincia de Burgos, la capital, Cardeñajimeno, Castrillo del Val, Carcedo de Burgos, Modúbar de la Emparedada y Cardeñadijo quedarán unidos mediante un carril bici de 15 kilómetros, gracias a los más de 3,42 millones de euros que se tiene previsto invertir en su construcción.
La obra consistirá en la creación de un carril bici bidireccional y una senda peatonal, con una sección de 3,50 metros. Su tramo inicial coincide con la actual Vía Verde del Ferrocarril Santander-Mediterráneo hasta la entrada al municipio de Cardeñadijo, por donde continuará hasta conectar con la carretera BU-800.
A la salida de Cardeñadijo el carril bici se situará en el margen derecho de la calzada hasta cruzar al margen izquierdo a la altura del acceso a la urbanización Cuatro Olmos. Continuará así hasta su paso por Cardeñajimeno donde volverá a cruzar al margen derecho, por donde discurrirá hasta el final del tramo en el Parque de Fuentes Blancas de la capital burgalesa.
En el caso de León, la actuación se ha dividido en dos proyectos. El primero de ellos prevé invertir 1,19 millones de euros para unir los términos municipales de San Andrés del Rabanedo y León capital. La obra consistirá en la construcción de dos carriles-bici unidireccionales y paralelos a cada margen de la carretera CL-623, de 1,9 kilómetros de extensión, en el tramo comprendido el límite del término municipal de San Andrés del Rabanedo con León, a la altura de la Avenida San Ignacio de Loyola, y la glorieta que da acceso a Villabalter.
El proyecto prevé la regularización de los anchos de los carriles a 3,50 metros para cada uno, lo que permite aprovechar los actuales arcenes para desarrollar los carriles en cada margen, con un ancho mínimo de un metro pintados de rojo.
Además, en los tramos donde no existen, se establecerán nuevas aceras para dar continuidad a los itinerarios peatonales y conectar los tramos de acera existentes, flanqueando la nueva infraestructura. Todo ello manteniendo los accesos a caminos y otras infraestructuras.
Y el segundo, contempla una inversión de 3,74 millones de euros para unir mediante carril-bici San Andrés del Rabanedo y Lorenzana, logrando, asimismo, dar continuidad al anterior. La obra consistirá en la construcción de dos carriles-bici unidireccionales y adosados a cada uno de los dos márgenes de la carretera CL-623, con 6,1 kilómetros de extensión.
Más en concreto, se prevé intervenir en el tramo comprendido entre la glorieta que da acceso a Villabalter y el inicio de la travesía de Lorenzana, atravesando los municipios de Sariegos y Cuadros. La carretera objeto de la actuación se trata de una vía conformada por una calzada de doble sentido de circulación, de 7 metros de anchura media, con pequeños arcenes a ambos lados.
A lo largo de la misma existen un gran número de accesos directos a fincas laterales. En su recorrido atraviesa zonas de travesía, ocupadas por viviendas, locales de hostelería, talleres, almacenes o naves industriales, en algunas de las cuales existen tramos de acera.
Finalmente, en el de Zamora, el proyecto prevé la creación, tras una inversión de 1,89 millones de euros, de una senda bidireccional de 10 kilómetros de recorrido que discurrirá de forma paralela a las carreteras CL-605 (Zamora-Segovia) y ZA-623 (Moraleja del Vino-Casaseca de las Chanas).
El trazado comienza en Moraleja del Vino, formando parte de viario urbano, siendo una vía compartida entre vehículos de motor y bicicletas. Una vez sobrepasada la localidad, discurrirá en paralelo al margen derecho de la ZA-623 hasta su llegada a Casaseca de las Chanas, donde se adentra por sus calles hasta conectar con la CL-605.
Al salir de esta localidad continúa en paralelo a la CL-605 por su margen derecho hasta llegar a la localidad de Arcenillas, donde se adentra por sus calles, abandonando la travesía con el fin de incrementar la seguridad y comodidad del usuario ciclista. Desde la salida de Arcenillas hasta el punto de confluencia de la carretera CL-605 y ZA-610 el carril discurre por el margen derecho de la CL-605, paralelo a la vía de servicio.
Una vez en el entronque de las citadas carreteras, el carril bici atravesará la ZA-610 y la ZA-P-1102 a la altura del Vivero La Pérgola, hasta entroncar con el itinerario ciclista municipal.
“La Junta de Castilla y León y su presidente están comprometidos con la movilidad sostenible, bien a través de inversiones como las que hemos presentado hoy aquí o las que estamos realizando en materia de transportes.
En este contexto se incluyen ayudas favorecer la renovación de las flotas; bonificaciones tanto en el transporte de viajeros por carretera, donde llegamos a la gratuidad en el caso del transporte a la demanda, como en el que se realiza por ferrocarril, siendo la primera Comunidad que aplica un descuento del 25 % a los abonos para los viajeros recurrentes”, ha concluido la consejera de Movilidad, María González Corral.