La Policía Nacional de Burgos identifica a los responsables de una estafa mediante mensajes de Whatsapp
A pesar de las alertas que la Policía Nacional ha divulgado en los últimos meses, no son pocos los estafadores que continúan lucrándose a través de esta modalidad delictiva que utiliza la aplicación Whatsapp para cometer el delito.
Las víctimas son familiares, generalmente padres de la persona que supuestamente demanda ayuda, contactando con ellos a través de mensaje en dicha aplicación siguiendo el método denominado del ‘hijo en apuros’.
Esto es lo que le ocurrió a una vecina de Burgos después de recibir un mensaje de alguien que fingía ser su hija. Se le solicitaba que le enviase dinero para solventar una situación complicada, por lo que la mujer no dudó en efectuar transferencias bancarias a dos números de cuenta por valor de algo más de 4.700 euros, en la creencia de que esa cantidad llegaba a su hija.
Con posterioridad, cuando ambas se pudieron comunicar, concluyeron que se trataba de una estafa.
Una vez presentada la denuncia en la Comisaría Provincial de Burgos, agentes especializados en estos delitos iniciaron la investigación del hecho consiguiendo acreditar la identidad y participación directa de dos varones, ambos receptores de las transferencias bancarias.
Igualmente se pudo acreditar que una vez que estos individuos dispusieron del dinero, “lo repartieron” mediante otras transferencias y en cantidades dispares entre otras personas, que sin duda forman parte de la misma organización, en la que cada miembro tiene un cometido.
Este tipo de delitos suelen cometerlos organizaciones criminales perfectamente estructuradas en las que cada miembro tiene una tarea asignada. Se encargan de abrir líneas de teléfono, cuentas bancarias con identidades usurpadas y también usan cuentas de personas que se prestan voluntariamente a cambio de un beneficio económico.
Los estafadores realizan envíos masivos de mensajes en Whatsapp, o bien seleccionan a víctimas de las que tienen información previa y simulan ser el hijo/a de la persona a la que le llega el mensaje.
Engañan a su víctima haciendo creer que su hijo/a tiene el teléfono roto y utiliza un nuevo número temporal. Un ejemplo de estos mensajes es: “Hola mama, mi teléfono está roto. Tengo un número temporal. No puedo llamar. Puedes enviar un mensaje Whatsapp al este número de teléfono +346XX5XX2X5?”, o mensajes similares.
La víctima sólo puede mantener el contacto por mensajes escritos de Whatsapp (de esta manera los estafadores evitan hablar por teléfono y que, a través de la voz, se descubra el engaño), aunque ya se han detectado casos en los que simulan la voz del familiar haciendo uso de la inteligencia artificial, logrando dar credibilidad.
Seguidamente el familiar recibe un número de cuenta bancaria de la persona que se hace pasar por su hijo, solicitándole el envío de una o varias transferencias, con la excusa de que ha tenido algún problema económico urgente. En otras ocasiones, solicitan el pago mediante empresas de envío de dinero internacional.
Para prevenir ser víctima de este tipo de delitos la Policía Nacional recomienda:
1. Desconfiar de llamada telefónica, mensaje de texto, de Whatsapp o de correo electrónico, que requiera un pago urgente, inesperado o por métodos no habituales, independientemente del motivo.
2. Realizar las comprobaciones necesarias y recelar de las peticiones de transferencias a cuentas desconocidas, solicitud de envío de dinero internacional o pagos mediante criptomoneda.