Mons. Mario Iceta, miembro de la Congregación para el Culto Divino de la Santa Sede
El papa Francisco ha nombrado al arzobispo de Burgos, mons. Mario Iceta Gavicagogeascoa, miembro de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos de la Santa Sede. Esta congregación se encarga de todo lo que espera la Sede Apostólica acerca de la promoción y regulación de la liturgia y, en primer lugar, de los sacramentos.
Además, promueve la acción pastoral litúrgica en todo lo referente a la preparación de la celebración de la eucaristía, de los demás sacramentos y los sacramentales, así como la celebración del domingo y de otras fiestas del año litúrgico y de la liturgia de las horas.
Don Mario Iceta asegura haber recibido el nombramiento con «sorpresa» y «alegría». Agradece al Papa «la confianza que muestra al elegir al arzobispo de Burgos para que sea un miembro de las congregaciones, que son los organismos que más estrechamente trabajan con él», explica. «Pienso que es un gesto de cercanía del Papa a la archidiócesis de Burgos en este Año Jubilar que ha sido tan importante para nosotros».
El pastor de la archidiócesis, asegura no poseer conocimientos litúrgicos «más allá de los de cualquier sacerdote». Con todo, fue profesor de liturgia y sacramentos durante tres años en el Seminario de Córdoba y en la Conferencia Episcopal Española ha sido miembro de la comisión episcopal de Liturgia, siendo uno de los encargados de traducir al euskera el misal romano y los leccionarios de la misa. «
Pido la ayuda de Dios para desempeñar el ministerio lo más fielmente posible y empeñándome todo lo que pueda y pediré ayuda a la Congregación para que me dé las orientaciones», declara.
El nombramiento, anunciado por la Sala Stampa de la Santa Sede, se ha hecho público este mediodía. Junto al arzobispo de Burgos el único español de la lista, el Santo Padre ha designado como miembros de esta Congregación a los cardenales Luis Antonio G. Tagle, prefecto de la congregación para la Evangelización de los Pueblos; Orani João Tempesta, arzobispo de São Sebastião de Rio de Janeiro; Charles Maung Bo, arzobispo de Yangon (Myanmar); Daniel Fernando Sturla Berhouet, arzobispo de Montevideo (Uruguay); Blase Joseph Cupich, arzobispo de Chicago (Estados Unidos); Cristóbal López Romero, arzobispo de Rabat (Marruecos); Celestino Aós Braco, arzobispo de Santiago de Chile (Chile); Kevin Joseph Farrell, prefecto del Dicasterio para los Laicos, Familia y Vida; Konrad Krajewski, limosnero de Su Santidad; Mario Grech, secretario general del Sínodo de los Obispos y Marcello Semeraro, prefecto de la congregación para la Causa de los Santos.
La lista la componen también los obispos Lazzaro You Heung-sik, prefecto de la congregación para el Clero; Filippo Iannone, presidente del Pontificio Consejo para los Textos Legislativos; Joseph Augustine Di Noia, secretario adjunto de la congregación para la Doctrina de la Fe; Ilson de Jesus Montanari, secretario de la congregación para los Obispos; Jean Legrez, arzobispo de Albi (Francia); Jaime Spengler, arzobispo de Porto Alegre (Brasil); Jorge Carlos Patrón Wong, arzobispo de Jalapa (Mexico); David Douglas Crosby, obispo de Hamilton (Canadá); Edmar Perón, obispo de Paranaguá (Brasil); Hugh Gilbert, obispo de Aberdeen (Gran Bretaña).
