El UBU San Pablo gana en un emocionante encuentro ante Puerto Sagunto
El UBU San Pablo Burgos superó al Fertiberia Puerto Sagunto (33-35) en un duelo igualado, emocionante y con dominio alterno en el que el cuadro castellano supo, esta vez sí, atesorar su renta en los últimos minutos para hacerse con una victoria que mantiene el hilo de esperanza de alcanzar el ‘play-off’. Jaime Gallardo (9 goles) y Ernesto López (6) fueron los más destacados del conjunto cidiano.
El choque comenzó con un siete inicial distinto al habitual, con Roberto Pérez de salida en vez de Dashko en la derecha, lo dio buen resultado en el arranque, tal y como se demostró en el parcial de 1-4 que endosaron los cidianos a los locales en los seis primeros minutos. La portería burgalesa, con Felipe como titular, fue una de las claves para el buen inicio, si bien los valencianos reaccionaron con un ritmo más ágil de lo que cabía esperar, lo que les permitió colocarse a un gol y ajustar la contienda en el 10.
El bloque castellano atesoraba su ventaja, con rentas de uno o dos goles, cuando al borde 12’ se veía con dos hombres menos por las exclusiones seguidas de Karlov y Dalmau. Una circunstancia que puso a prueba la resistencia rojinegra, si bien la exclusión de Del Rincón compensó ligeramente el desequilibrio reinante en la pista y el trance se saldó con un 1-1.
El toma y daca se mantenía en el 40×20 del pabellón Internúcleos y en el minuto 16, Karlov volvía a ser sancionado, lo que propició la primera ventaja local (10-9). El cuadro rojiblanco iniciaba entonces una escalada que, con una nueva inferioridad en las filas cidianas, esta vez de Dashko, llevaba el marcador al 12-9 en el 20’ para forzar el tiempo muerto de Nacho González.
En el reinicio, parecía que la tendencia iba a mantenerse, ya que Puerto Sagunto aumentaba su renta hasta los cuatro tantos, pero con todos los hombres sobre la pista, el bloque burgalés encontraba su juego para anotar un 4-0 de parcial, con tres goles seguidos de Ernesto López, que igualaba el duelo en el 23 (13-13). Toni Malla no esperaba para detener el encuentro, pero, en esta ocasión, los cidianos no vieron frenada su racha y daban la vuelta al tanteo para situar el 14-16 en el 27 con un gol de Dalmau. El conjunto rojinegro llegaba al descanso con un 16-17 y una exclusión al técnico, Nacho González, por protestar.
El choque se reanudó de forma errática y con un ritmo loco que llevaba a acumular fallos por precipitación en ambos bandos, lo que, por otro lado, mantenía el equilibrio en el luminoso (min. 7. 19-19). La tensión aumentaba en el encuentro, aun más cuando el tanteo marcaba ventaja para los visitantes. El público de Puerto Sagunto apretaba a sabiendas de la importancia de este partido para certificar la clasificación de su equipo para el ‘play-off’ y las ventajas cambiaban de lado por momentos.
Entonces, llegaba una nueva doble inferioridad del UBU San Pablo por las exclusiones de Vera y Gallardo en el 50 de juego y, nuevamente, los castellanos sacaban la garra y superar la circunstancia adversa con brillantez y colocar un 30-32 que obligaba a Toni Malla a pedir tiempo muerto en el 53. No sirvió la charla para reconducir la situación y el cuadro cidiano seguía en escalada, gracias a una gran aportación de Gallardo, infalible tanto al contraataque como desde su posición.
En el 55, con 31-34, el técnico local volvía a parar el juego. Díaz anotaba para acercar posturas y Nacho González era ahora quien pedía tiempo muerto para afrontar los tres minutos y medio que quedaban por delante (min. 27:22. 32-34). Los locales se plantaban con una defensa presionante y Ernesto fallaba el lanzamiento para apretar el marcador hasta el 33-34. Los fantasmas volvían a aparecer en las cabezas de los burgaleses. El cuadro castellano administraba su última posesión y la alargaba hasta el extremo.
El Fertiberia Puerto Sagunto veía, entonces, cómo descalificaban a Aarón Díaz por sabotaje a falta de 29 segundos, al interponerse en el saque de un golpe franco. Jaime Gallardo anotaba el penalti y no había tiempo para más. Triunfo para seguir creyendo en las matemáticas.