El equipo compite hasta el final en un duelo dominado por Gran Canaria 77-86
El Hereda San Pablo Burgos no pudo aprovechar su oportunidad de poner distancia con la zona baja y continúa inmerso en la lucha por la permanencia con las ocho victorias que tenía. El equipo
dirigido por Paco Olmos cayó ante un Gran Canaria que llegaba al Coliseum en su mejor momento de la temporada. Los de Porfi Fisac supieron dominar la totalidad de un encuentro en el que los
burgaleses compitieron hasta el final, con una mejor actuación en el último periodo.
Sin apenas tiempo para descansar, el cuadro burgalés mira ya a su próximo compromiso de Liga Endesa, este domingo en Lugo. Arrancaba con mejores sensaciones el encuentro Gran Canaria, que tomaba ventaja por medio de Miquel Salvó y John Shurna (4–9). Los de Olmos intentaban imprimir un punto más de energía a su defensa, pero no lograban evitar que los de Fisac se pusieran con siete arriba (7–14).
Varias decisiones arbitrales desencadenaban el enfado de la hinchada local, que animaba para empujar a los suyos cuando los claterianos ponían su máxima en nueve puntos (11–20). El final del primer cuarto llegaba con seis de renta visitante (16–22). Gran Canaria seguía mandando en el partido al inicio del segundo periodo, pese a los esfuerzos de Vítor Benite en el Hereda San Pablo Burgos (21–29). Buscaban reencontrarse en la cancha los castellanos, que lograban un parcial de 7–2, con Marc García y Max Salash, para reducir la ventaja canaria (28–31).
Los locales visitaban la línea de tiros libres para sumar puntos, pero marraban demasiadas oportunidades. Aprovechando la circunstancia, los canarios crecían con los triples de Nico Brussino y aumentaban su ventaja hasta los 12 puntos con los que se marcharon al descanso (31–43).
La aportación de Jarell Eddie y de Tarik Phillip en la reanudación daba esperanza a la grada del Coliseum en pensar en una posible remontada (39–47). Sin embargo, los errores ofensivos, unidos
a la falta de fortaleza defensiva, volvían a disparar la renta visitante que se abría primero hasta los 15 puntos (41–56) y después hasta los 16 (46–62). Estaba negado en ataque el cuadro local, lo que
hacía imposible recortar diferencias.
Mientras tanto, Shurna y AJ Slaughter hacían carburar la anotación visitante con facilidad. El tercer periodo se cerró con 21 puntos de diferencia (50–71). El conjunto castellano sabía que necesitaba salir con todo en defensa para tener opciones de engancharse al partido, pero los canarios seguían arriba (55–77). Los de Olmos progresaban con fe y con el aliento del Coliseum empujando en cada esfuerzo reboteador y en cada canasta.
Así, Eddie, Gamble y Benite consumaban un parcial de 15–3 que dejaba soñar con la remontada a los locales (70–80). Se dejaba el alma la grada animando para ayudar en las acciones defensivas
burgalesas, que obligaban a los grancanarios a gastar posesiones largas (74–84). El duelo se cerró en el Coliseum con victoria visitante (77–86).
El equipo burgalés disputará su próximo partido de Liga Endesa ante el Río Breogán, el domingo 3 de abril, desde las 12:30 horas, en el Pazo dos Deportes de Lugo.
Fotografía : SPB/Borja B. Hojas.