La Junta muestra su apoyo al sector de la patata en Castilla y León por su carácter estratégico y las posibilidades de futuro
En este encuentro, el consejero en funciones ha aprovechado para poner en valor el cultivo de la patata en la Comunidad, “este es un sector estratégico en Castilla y León debido a la importancia que tiene tanto en las explotaciones de regadío como en la industria agroalimentaria que acondiciona y transforma el producto”.
Jesús Julio Carnero ha pedido que “nos demos cuenta de que la patata que se produce aquí es de primer nivel y se ha convertido en una apuesta de futuro ya que la calidad que atesora la convierte en objeto de deseo para el consumidor final y la restauración”.
Desde la Consejería también se ha destacado “la importante labor que se está haciendo desde la Interprofesional de la Patata de Castilla y León para integrar todos los eslabones de la cadena alrededor de un producto tan nuestro. Se ha avanzado mucho pero seguiremos dando pasos tanto para mejorar la situación del cultivo como para conseguir la marca de calidad que distinga las patatas de la Comunidad”.
“Administración y sector tenemos que ir de la mano para lograr la mejora de la eficiencia de los cultivos, así como la profesionalización del sector, permitiendo amortiguar el aumento de costes y garantizando la continuidad de la patata en la Comunidad”, ha dicho Carnero.
Apoyo a la Interprofesional
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha apoyado tanto el nacimiento como el desarrollo de la Interprofesional de la Patata de Castilla y León. Prueba de ello es que el pasado año se concedió una subvención directa a esta Organización, por importe de 65.000 euros, para diversas actividades de las que varias ya se han puesto en marcha.
Junto al Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl), se está avanzando en el proceso de tramitación de la marca de calidad de la patata de Castilla y León; además, se está trabajando en el proyecto de teledetección de la patata y se ha avanzado bastante en la búsqueda de soluciones para la conservación de este producto.
En lo relativo a la bioeconomía, se está desarrollando un proyecto, también colaborando con el Itacyl, con el objetivo de conocer la viabilidad de la transformación de la patata para reducir su desperdicio.
La Interprofesional ya cuenta con una sede definitiva en Medina del Campo, ha realizado distintos actos promocionales y ha creado su web y sus perfiles en redes sociales.
Castilla y León es la comunidad con mayor superficie dedicada a este cultivo, ya que, con sus más de 17.300 hectáreas, supone un 26,2 % del total nacional, que asciende a 66.066 hectáreas.
En términos de producción, la Comunidad, con 0,81 millones de toneladas, supone el 37,7 % del total nacional, que asciende a 2,14 millones de toneladas. En el caso de la patata tardía (aquella que se comercializa desde el 1 de octubre al 15 de enero), la producción de Castilla y León, 0,557 millones de toneladas, supone el 77 % del total nacional (0,724 millones de toneladas).
Castilla y León tiene los rendimientos por hectárea más elevados de toda España con 46,7 toneladas por hectárea en 2021 (frente a 32,43 toneladas por hectárea obtenidas de media en el conjunto de España), lo que evidencia el alto grado de profesionalización de los productores de la Comunidad.
Gracias a esta importante presencia del cultivo y a la profesionalización del sector, en Castilla y León se ha desarrollado un importante conjunto de industrias de transformación y comercialización de productos elaborados a base de patata entre cooperativas y sociedades mercantiles, generando empleo y valor añadido. Y hay proyectos industriales al respecto de gran peso en la Comunidad.
El destino de la patata de Castilla y León es principalmente el consumo nacional, aunque también una parte se destina a exportación. De hecho, en 2021, se exportaron desde Castilla y León 112.000 toneladas que representan un tercio de las exportaciones nacionales de patata. Con respecto a 2020, las exportaciones de patata de Castilla y León crecieron un 25 % en valor (alcanzando 24 millones de euros) y 12 % en volumen.
El valor económico de los cultivos de patata, aunque tenga variaciones notables entre las distintas campañas (por la coyuntura de producciones y precios) es muy relevante, superando determinados años los 200 millones de euros.