El Museo de Burgos expone el legado del artista Maese Calvo y sus hijos cedido a la Junta
El Museo de Burgos acoge, hasta marzo de 2022, la exposición temporal ‘El legado del taller Maese Calvo e Hijos’, en cuya inauguración ha participado hoy el director general de Políticas Culturales, José Ramón González. Mediante esta exhibición, se pretende agradecer y mostrar al público la donación del taller de orfebrería de Maese Saturnino Calvo, ya que después del fallecimiento de Rafael Calvo, hijo de Saturnino, y del cese de actividad del taller, sus herederos han decidido donar a la Junta de Castila y León, para instalarlos en el Museo de Burgos, todos los materiales, herramientas, piezas y maquinaria con los que trabajó la familia.
Maese Calvo, nacido en Burgos en 1895 y fallecido en 1972 en la misma ciudad, simboliza una figura singular dentro del panorama artístico del siglo XX y se le puede considerar como uno de los orfebres más importantes de ese siglo. Su actividad representa el final del trabajo de los metales con las técnicas que hicieron sobresalir la platería castellana en los siglos pasados, mediante un modo de trabajar y una calidad que distinguen su obra de las creaciones industriales.
Casi desde sus inicios, Maese Saturnino Calvo contó con la colaboración de sus hijos, Saturnino y Rafael, que participaron en la mayoría de sus creaciones y mantuvieron la actividad durante varias décadas después de la muerte de su padre. En cuanto a sus obras, abarcan desde la orfebrería religiosa, quizás su faceta más conocida, hasta las piezas conmemorativas, joyería, rejería y mobiliario. El sello personal de los Calvo se completa con su extraordinario dominio de estilos y técnicas del pasado, sin olvidarse de imprimir un marcado sello personal.
Legado extraordinario
El legado recibido por el Museo de Burgos es ciertamente extraordinario por su calidad, variedad e interés para documentar la actividad artística de gran parte del siglo XX. En él se incluyen todos los utensilios, herramientas y maquinaria del taller del orfebre burgalés. Asimismo, entre las piezas recogidas por la galería también se encuentran modelos previos en cera o escayola, moldes de fundición, piezas sin finalizar y otros muchos elementos que muestran los distintos métodos y fases de trabajo del metal, el esmalte y el marfil.
Por otra parte, en el conjunto de la donación de los herederos de Rafael Calvo se contabiliza gran parte del mobiliario, biblioteca, antigüedades y piezas artísticas que decoraban el taller y sirvieron de inspiración para muchas creaciones. A todo ello hay que añadir varios centenares de documentos, fotografías y dibujos que reflejan todas las fases de creación del artista: las primeras ideas, las modificaciones, los proyectos definitivos o los calcos para pasar al metal los motivos elegidos. Finalmente, se han donado algunas piezas terminadas, lo que tiene gran interés, ya que la mayor parte de su obra se encuentra dispersa por todo el mundo.
Gracias a esta donación, el Museo de Burgos podrá conservar unido el conjunto del taller de Maese Calvo e Hijos, que estuvo en activo durante aproximadamente ocho décadas. Además, mediante la exposición, se pondrá a disposición de los ciudadanos que lo quieran contemplar y de los investigadores que quieran ahondar en sus trabajos. Actualmente, todo el material facilitado al Museo está siendo objeto de catalogación y estudio detallado.
La muestra estará abierta al público en la sala de exposiciones temporales del Museo hasta marzo de 2022. Con la mirada en el futuro, la galería burgalesa pretende dedicarle un espacio permanente a Maese Calvo en su Sección de Bellas Artes.