El PP exige el desarrollo urgente del Código del Buen Gobierno para acabar con “la falta de ética” del bipartito
La concejal del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Burgos, Andrea Ballesteros, ha instado este viernes al bipartito a iniciar los trámites para adaptar el desarrollo normativo del Consistorio al Código de Buen Gobierno de la Federación de Municipios y Provincias tras la adhesión al mismo aprobada en el Pleno de agosto y acabar así con la “falta de ética” que caracteriza al PSOE y Cs.
Ballesteros ha insistido en que “el oscurantismo y la falta de información son algo intrínseco a Daniel de la Rosa y sus socios de gobierno” y evidencian la necesidad de contar con herramientas que permitan frenar el deterioro de un Ayuntamiento “secuestrado por la mayoría absoluta de un bipartito que lo ha convertido en su cortijo”.
“Es imprescindible parar la deriva en la que está sumida la ciudad ante la pérdida de transparencia, de calidad democrática y de falta de comportamiento ético por parte de los miembros del ejecutivo”, ha sostenido Ballesteros.
El Grupo Municipal Popular insiste en la necesidad urgente de redactar un código sobre Transparencia y Buen Gobierno en la Institución ante los incumplimientos reiterados del Reglamento Orgánico y de Funcionamiento del Ayuntamiento de Burgos en sus artículos 95 y siguientes relativos al acceso a la información de los corporativos, en los que se refleja que estos tienen derecho a obtener del alcalde el acceso a todos los datos, antecedentes e informaciones que resulten precisos para el desarrollo de su función y que esta petición se entiende concedida por silencio administrativo sin en el plazo de cuatro días desde la solicitud no se adopta resolución denegatoria.
“Son varias las ocasiones en las que hemos requerido información en las secciones y no hemos recibido contestación ni explicación de porqué no se ha atendido esta, teniendo que recurrir en última instancia a la sección de Transparencia ante la vulneración de derechos, situación a todas luces contraria a derecho y opaca que refleja cada día más la necesidad de este tipo de herramientas en la institución” ha aseverado Ballesteros.
A ello se suma que los plazos se alargan hasta el extremo, recibiendo en el mejor de los casos contestación cinco meses después de presentar la primera solicitud vía registro o manifestándose en otros y, como ya denunció el Grupo Municipal Popular en el Pleno de julio, la inexistencia de informes anunciados a bombo y platillo por el bipartito en diversas comisiones.
Este es el caso del informe supuestamente realizado por la responsable de la Unidad Técnica de Protección Civil relativo a la limitación de aforos en el acceso a la Flora y zonas aledañas con motivo de la COVID-19 tratado en la comisión de Personal y que Transparencia ha revelado como inexistente.
Las situaciones en las que queda patente “el oscurantismo y el ninguneo” del bipartito a los corporativos son múltiples y una de las más recientes es la que atañe a la intromisión del portavoz municipal de Cs, Vicente Marañón, en la adjudicación del contrato de residuos, si bien es solo un ejemplo más que se suma a otros, como la actuación del acalde usando un día el coche y conductor oficiales para un acto de partido, saldando el gasto con una aportación de menos de diez euros.
También sobresalen irregularidades como la de aquellos corporativos que impulsan procedimientos de subvención a entidades con las que están vinculados o tienen interés para luego abstenerse en la votación.
Por todo ello, la edil popular ha señalado que se hace indispensable comenzar a trabajar en esta línea, generando una institución más trasparente, que destierre las malas prácticas e incremente la confianza de los ciudadanos en los organismos públicos que permita a estos contar con información más accesible y detallada.
“Las prácticas oscurantistas del bipartito a golpe de rodillo en este Ayuntamiento tienen contados sus días desde que se materialice la petición del Grupo Municipal Popular para que se organice un grupo de trabajo o se pongan en marcha los mecanismos necesarios para la redacción de este código”, ha sentenciado Ballesteros.