El PP pide que el Ayuntamiento de Burgos elabore un Código de Buen Gobierno ante la falta de transparencia e imposición del bipartito

El Partido Popular siempre ha mostrado su preocupación por la transparencia en el ejercicio de la labor de Gobierno de los responsables públicos en las instituciones y por un correcto comportamiento en el desarrollo de las funciones políticas. Ello llevó a que en 2014 el Ayuntamiento aprobara la adhesión al Código de Buen Gobierno que la FEMP y que ahora considere imprescindible adherirse a su versión actualizada.

Durante estos últimos años la sociedad no ha dejado de avanzar y de implementar mejoras tecnológicas que han permitido un notable progreso en el campo de la información y de la democracia participativa real, haciendo que la gestión pública transite hacia la mejora continua, donde los ciudadanos quieren implicarse en la vida política.

Por ello, la portavoz del grupo municipal popular considera que “es necesaria una voluntad real por la transparencia y la integración de los burgaleses un las decisiones públicas que no existe en el gobierno municipal, y es preciso apostar por la honestidad y la ejemplaridad de los responsables públicos porque es el único modo de que los ciudadanos vayan recuperando la credibilidad que han perdido en la política como forma de resolver sus problemas reales”.

En el Ayuntamiento de Burgos, muy al contrario, cada día se producen conductas en el gobierno municipal que los populares consideran que se encuentran muy alejadas de la ejemplaridad y del deseo de velar por en interés general y por ello propondrán en el Pleno del próximo viernes una proposición para adherirse nuevamente a la versión actualizada del Código de Buen Gobierno que la FEMP, como paso previo a la elaboración de uno propio del Ayuntamiento de Burgos que dote de herramientas para que la ética pública, la ejemplaridad y la integridad dejen de ser precisamente recomendaciones para pasar a formar parte del compromiso que todos los grupos políticos, los corporativos y los responsables públicos asumamos, no siendo un mero trámite de buenas prácticas”.

“El Ayuntamiento de Burgos no se puede permitir un bipartito que imponga su mayoría en las comisiones de investigación para mentir y tapar sus escándalos, ni informes de control que pongan de manifiesto las irregularidades en la contratación menor, ni gobernantes que participen en la toma de decisiones de las que debieran de mantenerse al margen tal y como les exige el Código Ético de su propio partido”, ha concretado Blasco reiterando la necesidad de esta reglamentación.