Finaliza la construcción de la Planta de Transferencia y pretratamiento de RCDs en el Valle de Mena
El Consorcio Provincial de Residuos ha finalizado la construcción de la Planta de Transferencia y pretratamiento de RCDs en el Valle de Mena. Dicha instalación ubicada en el polígono Industrial de Santecilla, pretende dar servicio a toda la zona del Norte de Burgos y a sus ayuntamientos. Esta planta se ha construido en el marco del Convenio de escombreras suscrito entre la Junta de Castilla y León, la Diputación y el Consorcio de Residuos, que busca dar una solución, y realizar una correcta gestión, de los residuos de construcción de obras menores.
Esta planta también admitirá los residuos voluminosos. En la actualidad el Consorcio viene realizando la recogida mensual de muebles y enseres en todos los ayuntamientos que así lo solicitan previa llamada telefónica gratuita (900 10 18 90 para la Zona Norte y 900 100 237 para la Zona Centro-Sur), y siempre conforme al calendario que a todos los ayuntamientos se les envía a primeros de año. Sin embargo, la recogida de aquellos residuos distintos a muebles y enseres no se está realizando. Este tipo de residuos se conocen como voluminosos.
Por ello, esta infraestructura servirá también para albergar estos residuos voluminosos. El “modus operandi” para la gestión de escombros y/o voluminosos será mediante llamada de los ayuntamientos al Consorcio para solicitar este servicio. Una vez solicitado, un camión se pasa a retirar los escombros que cada ayuntamiento almacena. El coste del servicio es de 15 €/m3. Pero este servicio no solo va dirigido a los ayuntamientos, también va a los particulares que han contratado una obra menor y se quieren deshacer de los escombros. En este caso, el particular también podrá depositar en la planta los escombros siempre que acompañen la correspondiente Declaración Responsable de obra menor expedida por su ayuntamiento. Solo en ese caso se les permitirá el acceso a planta. El Consorcio liquidará al ayuntamiento por las toneladas que deposite el particular.
Por lo tanto, esta instalación no es ningún punto limpio donde únicamente acuden los particulares y depositan residuos de muy diversa naturaleza, como residuos peligrosos o aparatos eléctricos y electrónicos como frigoríficos y lavadores. Este tipo de residuos sigue otro canal y no se admite su entrada en la Planta del Valle de Mena. Está diseñada y concebida únicamente para voluminosos y residuos de construcción y demolición de obras menores.
Esta planta, cuya inversión final ha sido de 513.000 €, se suma a la ya existente en Villadiego, y persigue tejer una red de instalaciones en la provincia que puedan evitar la proliferación de escombreras y facilitar la correcta gestión de los escombros.
Una vez depositados los escombros y voluminosos se procederá por el operador de la planta a su separación y agrupación de los diferentes tipos de residuos en trojes y su posterior envío a gestores autorizados para su recuperación y aprovechamiento. Su capacidad de diseño permite albergar hasta 5.000 T/año de escombros y voluminosos para su pretratamiento y clasificación.