El MEH presenta la exposición ‘Caligrafía y Pensamiento’, un recorrido por la evolución del grafismo desde el siglo XI hasta la actualidad
El Museo de la Evolución Humana ha presentado esta mañana la exposición ‘Caligrafía y Pensamiento’ que se expone en el espacio de talleres del Museo (planta -1) y que recoge el grafismo a lo largo de más de ocho siglos, en los que el hombre inscribió con incipientes caligrafías. La exposición, realizada en colaboración con el Archivo Catedralicio de León ha sido presentada por Rodrigo Alonso, responsable de Didáctica y Dinamización del MEH y Adolfo Alonso Ares, comisario de la misma y se podrá visitar con entrada gratuita en horario de apertura del Museo durante todo el verano.
La muestra reúne un centenar de documentos originales que son un recorrido por la evolución de las grafías desde el siglo XI hasta la actualidad. Son documentos medievales, manuscritos históricos y cartas personales de escritores como Rafael Alberti, Antonio Gamoneda o Luis García Montero.
Una parte de la exposición está dedicada a los más pequeños donde se les enseña el alfabeto, la caligrafía y los instrumentos que se han utilizado a lo largo de la historia para escribir. Otra parte de la muestra explica cómo han evolucionado las grafías del alfabeto latino desde la época romana hasta la aparición de la imprenta. O
El objetivo de esta exposición es mostrar que, al igual que las huellas dactilares son irrepetibles, lo son también los trazos de la escritura personalizados en cada individuo. El ser humano más incipiente humanizó la naturaleza y contrajo sus huellas que vaticinaron otro sistema comunicativo. Después, cuando anotó con grafismos lo que pensaba se habían forjado los nuevos modos de transmitir e incidir en los demás; de plasmar pensamientos para que los tiempos futuros fueran también conocedores de la escena.
El ser humano es el creador de alegorías mimetizando el tiempo; pintando en los espacios donde piensa; diferenciando los signos como peldaños de la gran escalera en la que vivimos. Desde la Edad Media contamos con abundancia de signos y lenguas comunicadoras para que sepamos nutrirnos y entendernos con quien contempla el tiempo a nuestro lado.
El visitante podrá admirar la configuración de las letras, las silabas y los vocablos en el nexo fértil de la escritura ya que en la exposición se ofrece la escritura como eslabón iniciático y tangible y consigna el dibujo de las letras, de los signos, a lo largo del tiempo (el modo más personal de comunicar)
