Se presenta en la Diputación de Burgos el libro El Alfoz de Santa Gadea
El Alfoz de Santa Gadea es una jurisdicción documentada como territorium, por tanto, con su propia organización fiscal, judicial y defensiva, desde el siglo IX, concretamente en el año 857. Se documenta de nuevo en el año 934, peo en ese
momento ya como alfoz. En el año 999 tenemos constancia del alfoz de Santa Gadea y de la Selva de Higedo.
El Conde Sancho García, en el año 1011, Tres lugares del Alfoz de Santa Gadea medieval (Santa Gadea y Quintanilla de Santa Gadea) puso en manos de su hija Tigridia, como señora del monasterio de Oña y como garante de la herencia que deberá trasmitir a García Sánchez entre muchos lugares.
Esta importante donación, que no volveremos a ver en manos del Monasterio de Oña, es buena prueba de que la funcionalidad de la donación era una adscripción provisional. Sancho III de Navarra detentará el poder en el Alfoz de Santa Gadea entre la muerte del conde en 1028 y su propia muerte en 1035, es decir unos 7 años. Su testamento divide su reino entre sus hijos. El mayor García Sánchez heredará el reino de Pamplona ampliado con una buena parte del condado
de Castilla, entre la que se encontraba la actual comarca Merindades. Sin embargo los altomedievales alfoces de Santa Gadea, Bricia y Bezana formaron parte de la dotación de Fernando, el segundo hijo, que se casará con la heredera de León y acabará siendo rey de León.
Esta separación fue determinante para el devenir histórico de la comarca, porque hizo que las jurisdicciones de Santa Gadea, Bricia y Bezana formaran parte de la Merindad Mayor de Aguilar. Mientras que el resto de las jurisdicciones de la
comarca Merindades se incluyeron en la Merindad Mayor de Castilla Vieja.
