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Resumen de la jornada de inauguración del Auditorio – Palacio de Congresos Fórum Evolución

Ayer la ciudad entera se vistió de gala para recibir a SM la Reina Doña Sofía, quién fue la madrina en el acto de inauguración del Auditorio- Palacio de Congresos Fórum Evolución. Con este acto queda completamente inaugurado el Complejo de la Evolución Humana, formado por el propio auditorio, por el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) y el Museo de la Evolución.

Con rigurosa puntualidad, minutos antes de las 7 de la tarde, la Comitiva Real llegó al paseo de Atapuerca procedente del Monasterio de las Huelgas, hasta donde la monarca se desplazó para conocer de primera mano las obras realizadas por Patrimonio Nacional para mejorar la accesibilidad.

La Reina, que vino acompañada por Ana Mato, ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, deslumbró a todos los presentes con su elegancia, ataviada con un bonito vestido y calzando unos zapatos de altísimo tacón.

Lo primero que hizo al bajar del coche fue saludar a los miles de burgaleses congregados en los alrededores del Fórum. Junto a toda la gente que quiso recibir a SM con cariño, también había un numeroso grupo de ciudadanos protestando con pancartas y silbatos por los recientes recortes del gobierno, y un par de banderas republicanas.

En la entrada del inmueble numerosas personalidades recibieron a su majestad, entre las que destacar al presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera y al alcalde de nuestra ciudad, Javier Lacalle, quién durante el acto se mostró visiblemente nervioso y emocionado. Una vez todos en fila, se homenajeó a la Reina con el tradicional «salto del Tetín». Se trataba de la primera vez que esta muestra de respeto, típica de nuestra celebración del Corpus, iba dirigida a un miembro de la Casa Real.

La pequeña Alba Ibáñez, (hija del vicealcalde Ángel Ibáñez) miembro del grupo de folclore Justo del Río, hizo entrega de un bonito ramo de flores a su majestad, y posteriormente la reina entró en el edificio donde los miembros de la Corporación Municipal la esperaban para recibirla y saludarla.

Pasado el turno de saludos, Doña Sofía destapó una moderna placa conmemorativa, colocada sobre un atril frente al atrio central del edificio. Esta placa, al igual que todo el edificio, es una muestra más de que tradición y vanguardia pueden ir de la mano, al igual que lo hacen el suelo original del antiguo convento de San Pablo y las 6 plantas que sobre él se erigen.

A continuación, y pudiendo disfrutar de un guía excepcional, el arquitecto del proyecto, Juan Navarro Baldeweg, Doña Sofía visitó las instalaciones para dirigirse después al auditorio donde unas 1.400 personas la recibieron en pie y con un sonoro aplauso.

Y una vez la reina estuvo acomodada en su asiento de la fila 13, comenzó un vídeo resumen del que ha sido el proceso de construcción de este imponente inmueble de 35.000 metros cuadrados.

Tras el vídeo comenzó el concierto, y todos los asistentes, majestad incluida, pudimos disfrutar con la virtuosa interpretación de la novena sinfonía de Beethoven que la Orquesta Sinfónica de Castilla y León y el coro formado por unas 150 voces pertenecientes a la Federación Coral Burgalesa y al Orfeón Pamplonés realizaron.

Terminado el concierto, y con el auditorio en pie, se interpretó un emotivo Himno a Burgos y tras los minutos de aplausos con los que los asistentes quisieron premiar la gran actuación dada, y homenajear tanto al maestro Frühbeck de Burgos, como a Juan Gabriel Martínez, la Reina, abandonó la sala acompañada por las autoridades.

Una vez en el atrio se hizo la foto de recuerdo y se la agasajó con un especial regalo: el facsímil de las Leyes de Burgos.

Y así concluyó un día para el recuerdo, y que Javier Lacalle, alcalde de la ciudad, resumía así.

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