Sanidad habilita un servicio de alta precisión para la predicción de episodios de altas temperaturas
El servicio puesto en marcha por la Junta de Castilla y León para ver la previsión de temperaturas extremas al máximo detalle geográfico está disponible en el Portal de Salud , además de en la propia web del Sistema de vigilancia de temperaturas extremas en Castilla y León , en la que se puede visualizar en detalle por municipio.
Para las temperaturas diurnas, el sistema de predicción establece cuatro niveles de riesgo:
- Nivel 0: AUSENCIA (color verde)
- Nivel 1: BAJO (color amarillo)
- Nivel 2: MEDIO (color naranja)
- Nivel 3: ALTO (color rojo)
Estos niveles se calculan a partir de temperaturas umbral establecidas para cada localización, y la previsión de superación para el día de visualización y los tres días posteriores.
Las temperaturas nocturnas reciben también una clasificación, en función de los umbrales de superación de temperaturas:
- NORMAL: cuando la temperatura mínima no alcanzará los 20º C
- Noche TROPICAL: para temperaturas mínimas que superan los 20º C
- Noche ECUATORIAL: cuando se superen los 25 ºC en la temperatura mínima
- Noche TÓRRIDA: si la temperatura mínima supera los 28º C
Recomendaciones en época de altas temperaturas
La Consejería de Sanidad recuerda que deben estar especialmente protegidos ante estos episodios las personas mayores, aquellas con alguna discapacidad y los niños menores de 5 años; las personas con enfermedades crónicas (hipertensión, diabetes, cardiopatía, obesidad, alcoholismo); aquellas que tomen alguna medicación habitualmente; y las que realizan trabajos físicos intensos o deporte al aire libre, cuando hay temperaturas elevadas.
El exceso de calor provoca efectos como calambres, por pérdida de sales; agotamiento (malestar, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, sed intensa); deshidratación (decaimiento y sensación de postración); y golpe de calor, que tiene como síntomas principales las náuseas, vómitos, dolor de cabeza, piel caliente y enrojecida, aumento de la temperatura corporal por encima de 40°, inestabilidad al andar y mareos, pudiendo llegar a tener convulsiones y coma.
Los consejos habituales para protegerse del calor pasan por evitar salir de casa durante las horas centrales del día (entre las 12 del mediodía y las 6 de la tarde); beber más líquidos, sin esperar a tener sed, sobre todo agua y zumos de fruta ligeramente fríos; evitar comidas copiosas, tomar verduras y frutas, comer menos cantidad y más veces al día y no tomar comidas calientes ni abusar de las bebidas alcohólicas.
Se aconseja además descansar con frecuencia a la sombra, usar ropa de tejidos naturales, ligera y holgada, de colores claros, sombrero, gafas de sol y cremas protectoras solares; permanecer en espacios ventilados o acondicionados; bajar las persianas durante el día y cerrar las ventanas; mantener los alimentos en el frigorífico y vigilar siempre las medidas higiénicas de conservación; y ayudar a las personas que puedan estar en mayor riesgo de sufrir los efectos del calor.
¿Cómo actuar cuando una persona sufre un golpe de calor?
La Consejería de Sanidad recomienda, ante la presencia de una persona con un golpe de calor o síntomas similares, llamar en primer lugar al 1-1-2. A continuación, colocar al enfermo en un lugar a la sombra, airearle en lo posible y, si está consciente, colocarle la cabeza ligeramente elevada y ofrecerle abundante agua. Además, conviene refrescarle con agua fría o hielo, sobre todo la cara y las axilas, pero no meterle en la bañera para enfriarle.
Y nunca dar líquidos a una persona inconsciente. Ante cualquier duda, se aconseja contactar con los profesionales sanitarios.