Un proyecto de la UBU entre los candidatos al Premio Nacional de Arqueología
El proyecto de Marta Navazo Ruiz, de la Universidad de Burgos (UBU); Rodrigo Alonso Alcalde, del Museo de la Evolución Humana (MEH) y la Universidad de Burgos; y Alfonso Benito Calvo, del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) es uno de los 18 proyectos aspirantes al III Premio Nacional de Arqueología y Paleontología de la Fundación Palarq.
Bajo el título “Hacia el comportamiento humano moderno. Estrategias socioeconómicas y culturales de los últimos neandertales de la Meseta Norte (Cueva Prado de Vargas. Cornejo, Burgos)” este estudio analiza y estudia la dinámica socioeconómica del yacimiento, con el fin de aportar nuevos datos sobre las causas que motivaron los cambios previos a la desaparición neandertal.
Este premio reconoce la excelencia y originalidad de proyectos arqueológicos y paleontológicos dirigidos por equipos de investigación españoles, desarrollados tanto a nivel nacional como internacional, sin restricciones de culturas o períodos históricos está dotado con 80.000 euros.
Todos los proyectos aspirantes están liderados por equipos de investigación pertenecientes a instituciones públicas españolas y, en todos los casos, se trata de investigaciones en curso, ya sea en territorio nacional o en el extranjero.
Un comité, formado por expertos en arqueología y paleontología, seleccionará a los seis proyectos finalistas, entre los que se elegirá el ganador de esta tercera edición. El premio se dará a conocer el próximo 15 de junio en una gala que tendrá lugar en el Museo Arqueológico Nacional.
Hacia el comportamiento humano moderno. Estrategias socioeconómicas y culturales de los últimos neandertales de la Meseta Norte (Cueva de Prado Vargas (Cornejo, Burgos)
El yacimiento de la cueva de Prado Vargas se localiza en la vertiente sur de la Cordillera Cantábrica, conectando con el borde septentrional de la Meseta Castellana. Esta cueva pertenece al sexto nivel del sistema endokárstico de Ojo Guareña y conserva un relleno sedimentario kárstico de 9 m de espesor, que contiene varios niveles de ocupaciones musterienses terminales.
Los posteriores registran ocupaciones neandertales datadas entre 54 y 39 ka (nivel N4) y más antiguas (niveles N8 y N9) (Navazo et al., 2021).
Las excavaciones iniciadas en 2016 en el nivel N4, han arrojado gran cantidad de restos arqueológicos, indicando que la cavidad fue visitada de forma recurrente, registrándose ocupaciones de larga duración que incluyen actividades de carnicería, trabajos en madera y piel, economía de reciclaje y actividades que se desarrollaron tanto en el interior como en el paisaje circundante.
Este nivel ha confirmado también la presencia de niños, como lo demuestra la presencia de un diente de cabrito neandertal hallado en 2019.
La excavación en extensión de este nivel N4, apenas iniciada en los últimos años, y del nivel subyacente N8 permitirá obtener datos detallados sobre el modo de vida de los penúltimos y últimos neandertales del borde norte de la Meseta Castellana, así como reconocer su dinámica socioeconómica, con el fin de aportar nuevos datos sobre las causas que motivaron los cambios previos a la desaparición neandertal.
Para alcanzar este objetivo, se propone un proyecto de cuatro años de duración para excavar la mayor parte del nivel N4 y ampliar la excavación del nivel N8, comparando ambos niveles mediante un estudio científico multidisciplinar que implica el análisis de los procesos de formación, la industria, la fauna, la microfauna, los restos paleoantropológicos y el registro paleoambiental.
Al mismo tiempo trasladaremos los resultados a la sociedad como elemento de revitalización sostenible del territorio.