El derbi burgalés arrancó sin un dominador claro y durante los primeros 10 minutos de juego las acciones más peligrosas fueron dos lanzamientos de esquina de los locales. Superado ese primer pulso con tablas, un disparo desde de la izquierda de Gabri Martínez inauguró por completo el derbi.
Con las líneas juntas y un Unai Elgezabal incrustado entre los centrales para formar una línea de cinco en defensa, el Burgos CF tuvo que madurar el partido desde la defensa. Y ya con un cuarto de hora de juego en el reloj, el conjunto de Jon Pérez Bolo dibujó su primera jugada de ataque con peligro que concluyó con un pase filtrado a la espalda de la defensa que Fer Niño no logró remachar ante la rápida salida de Ramón Juan que incluso forzó la cartulina para el delantero.
La versión más ofensiva del Mirandés tuvo su oportunidad en el 18′, aunque Caro se empleó con calidad para evitar el 1-0. La respuesta del Burgos fue controlar el partido y cociendo a fuego lento por medio de un Álex Sancris muy activo durante la primera mitad.
El madrileño fue la pesadilla de Jonathan Gómez, con continuos centros desde la derecha y desmarques al espacio, aunque una acción suya provocó una contra de los jabatos que tuvo que desbaratar Caro con una rápida salida. Anduva se heló con la lesión de Pablo Ramón, retirado en camilla tras un feo gesto en plena defensa del balón.
Sin mucho más que contar que un nuevo centro de Sancris a la salida de un córner, un balón envenenado de Matos a la escuadra izquierda de Ramón Juan y un tímido apretón final del Mirandés, se llegó al descanso en Anduva. Sin cambios, el cuadro burgalés trató de coger las riendas de nuevo en el segundo tiempo, pero no logró enviar a su campo al conjunto rojillo hasta el 50′.
Después de una caída en área propia, Fer Niño fue derribado en la contraria en la siguiente acción, pero un fuera de juego dejó sin efecto el penalti. La acción no tuvo efecto en el marcador, pero sí en la dinámica del encuentro, ahora mucho más de cara para los intereses del conjunto blanquinegro.
Y sobre el 54′ un envío desde la izquierda finalizó en la bota de un Anderson Arroyo imperial que apareció en el área con tanta potencia que dejó temblando el arco mirandesista.
La alegría duró poco porque 4 minutos después el colegiado señaló penalti tras una jugada embarullada en el área visitante. La Gumina convirtió el penalti superando por muy poco la estirada de Caro.
El derbi entró en ebullición con los dos tantos y en ese ambiente mucho más caluroso, el Mirandés se creció obligando a Caro a hacer una de las intervenciones del partido. Pero poco pudo hacer el portero ante el segundo gol rojillo que llegó a la salida de ese mismo córner.
Con el marcador en contra, Bolo introdujo las primeras sustituciones en su equipo en busca de una reacción que permitiera sumar en el derbi. Matos lo intentó con el exterior en el 75′ y Mumo desde fuera del área en el 82′, pero todo hacía indicar que los puntos del derbi se iban a quedar en Anduva.
Con todo el Burgos CF trató de evitarlo y cerca estuvo al menos de rascar uno de ellos con un centro de Borja que pegó en el palo.
Con un rival metido atrás y esperando su opción de salir a la contra, el conjunto capitalino no dio con la tecla que permitiera igualar la contienda en un final de partido muy accidentado. El Burgos volverá a buscar los tres puntos en un El Plantío inmaculado el próximo sábado a partir de las 16:15 horas.
Fotografía: Burgos CF