EL Alcalde de Burgos presenta el Proyecto de Mejora y Dinamización del Parque de la Quinta
Dinamizar el uso del Parque de la Quinta, adecuar su estructura y funcionalidad al uso que se le está dando actualmente, recuperar y potenciar la idea para la que fue concebido el parque en sus orígenes, sanear el arbolado decrépito, eliminar todas las zonas cerradas con excesiva vegetación y mejorar la visibilidad y seguridad de los peatones es el objetivo del proyecto de mejora y dinamización de este pulmón verde de la ciudad de Burgos, que ha presentado esta mañana el alcalde, Javier Lacalle y la concejala de Medio Ambiente, Carolina Blasco. El plazo de ejecución de las obras será 4 meses y el presupuesto de la actuación 311.864,20 €, IVA incluido.
El proyecto pretende respetar y mantener la idea general del parque inicial, con su zonificación por ecosistemas, respetando la zona ajardinada de su parte este.
No se trata de la ejecución de una obra al uso, sino de una actuación forestal sobre la vegetación existente, que se acompaña de pequeñas actuaciones de mejora de infraestructuras, pavimentos, mobiliario urbano y cartelería.
En líneas generales el proyecto se centra en las siguientes propuestas.
Renovar las zonas en mal estado del pavimento de los caminos principales, con un doble tratamiento superficial compuesto por una lechada bituminosa.
Actuar sobre las sendas interiores existentes dándolas anchura uniforme de 1,80 m y 1,20 m, y renovando su firme con pavimento terrizo tratado con producto compuesto por un estabilizante con cal para la mejora de su adhesividad y cohesión, sin perder sus características permeables. Se delimitarán mediante un encintado lateral con chapa metálica de acero galvanizado.
Proceder a la reposición de baldosas, bordillos, adoquines, tapas de arquetas, etc., que se encuentren deterioradas.
Mantener el alumbrado existente por considerar que en estos momentos es el adecuado.
Renovar el mobiliario urbano en lo referente a papeleras y se sustituirán los antiguos bancos metálicos por otros de madera similares a los dispuestos en otras zonas del Parque.
Repintar farolas y bancos de hormigón, se eliminarán los grafitis de los bancos de piedra y se rehabilitarán los bancos de madera existentes en mal estado.
Adaptar los accesos al río Arlanzón mejorando la permeabilidad de movimiento entre la ribera del Arlanzón y el Parque, ampliando la anchura de las bajadas, mejorando el pavimento en la zonas de transición y disponiendo pasamanos adaptados a personas de movilidad reducida en las rampas de acceso al río.
Eliminar los árboles que por seguridad no se encuentran en condiciones de permanecer en el mismo (con especial atención a Populus x canadensis y Aesculus hippocastanum) por el peligro que entraña de caída de ramas e incluso de derribo de árboles completos.
Mejorar la transitabilidad y generar una ambiente más seguro para los usuarios (caída de ramas), se realizarán podas de saneamiento para la eliminación de ramaje seco y podas de formación para la compensación de la estructura de árboles o arbustos.
Sobre la masa arbustiva se realizarán trabajos silvícolas consistentes en podas, claras, clareos y resolveos, buscando disminuir la densidad de la masa, mejorar la visibilidad horizontal y permitir una mayor entrada de luz dentro del parque. De esta forma se fomenta una mayor seguridad de los usuarios.
En el caso de la zona de ribera, y dado que el sustrato sobre el que se ha implantado la vegetación se encuentra en un estado de agotamiento de nutrientes, se realizará una enmienda orgánica en el suelo que favorezca la permeabilidad de suelo y la absorción de los nutrientes por las plantas.
Retirar y renovar la malla antihierba que se encuentra deteriorada.
Realizar plantaciones de sustitución de elementos muertos y de complemento a la masa vegetal ya existente. Serán 282 árboles y más de 700 arbustos. Se respetan los criterios del diseño del antiguo parque y se utilizarán las mismas especies existentes comprendidas dentro de la vegetación característica mediterránea, atlántica y de ribera de la provincia de Burgos.
Eliminar los grafitis de las rocas decorativas dispuestas por el parque.
Colocar cartelería explicativa, dividida en paneles, que explicarán cada uno de los diferentes ecosistemas. Lógicamente, se retira la antigua.
Colocar placas que identifiquen las especies vegetales de forma individual, indicando la familia a la que pertenecen.
Colocar casas nidos para paseriformes, quirópteros y pequeñas rapaces nocturnas.
No se actúa sobre las redes de servicios, ya que no es preciso incrementarlas y se encuentran en adecuadas condiciones de uso
Sobre la zona ajardinada de los rodales 1 y 2 no se acometerán actuaciones de relevancia y en las zonas del jardín naturalizado de transición se dispondrá arbolado y arbustos que conlleven a completar y mejorar el valor paisajístico de los parterres, en especial en el rodal 3.
La zona de ribera, es una de las zonas más variable en cuanto a plantación y con disposición muy heterogénea. Al eliminar la chopera de alineación queda superficie para la plantación donde se dispondrán especies como “Alnus glutinosa”, “Prunus dulcis”, “Quercus ilex suds.ilex” , “Quercus faginea”,” Fraxinus angustifolia”, etc.
En la zona mediterránea, además de las labores previas, se introducirán algunos ejemplares de “Juniperus sabina”, “Juniperus communis”, “Pinus pinea” y otras especies en menor medida que en otras áreas puesto que es una zona más desarrollada y con menos superficie disponible.
De igual modo sucede en la zona atlántica donde se introducirán algunos ejemplares de “Fagus sylvatica”, “Betula alba” y “Sorbus domestica” principalmente.
Un parque donde se representan los Ecosistemas de la provincia de Burgos
El Parque de la Quinta es uno de los “pulmones verdes” de la capital burgalesa desde sus orígenes; en su zona comprendida entre la calle Cartuja de Miraflores, el antiguo puente Gasset, el río Arlanzón y el viaducto de la carretera BU-11.Sufrió una destacada renovación en el año 1998.
La solución básica adoptada para dicha actuación fue la de eliminar la chopera existente y crear un espacio verde, lo más natural posible y en el que se representasen los ecosistemas presentes en la provincia de Burgos. Esto conllevó la creación de tres zonas diferenciadas fundamentalmente: bosques atlánticos (zona este), zonas de vegetación mediterránea (zona oeste) y bosques de ribera (zona norte paralela al río Arlanzón), con sus correspondientes zonas de transición. En la zona este del parque hay una zona ajardinada que sirve de transición entre el medio urbano y el medio natural.
Ya en su momento se concibió el parque con la idea de dejar que la vegetación se desarrollase de forma natural, para al cabo de un tiempo (más de 15 años, en este caso), realizar los clareos precisos y dejar un bosque maduro en cada uno de los rodales.
Dado que el paso del tiempo ha provocado también el progresivo deterioro y envejecimiento de las instalaciones, se considera que ha llegado el momento de actuar.
La actuación permitirá la plantación de otros casi 300 árboles y más de 700 arbustos.
La inversión para mejorar este parque será de 312.000 euros.
Las obras durarán cuatro meses y se ejecutarán este verano y otoño. El concurso se aprueba en diez días.
Dinamizar el uso del Parque de la Quinta, adecuar su estructura y funcionalidad al uso que se le está dando actualmente, recuperar y potenciar la idea para la que fue concebido el parque en sus orígenes, sanear el arbolado decrépito, eliminar todas las zonas cerradas con excesiva vegetación y mejorar la visibilidad y seguridad de los peatones es el objetivo del proyecto de mejora y dinamización de este pulmón verde de la ciudad de Burgos, que ha presentado esta mañana el alcalde, Javier Lacalle y la concejala de Medio Ambiente, Carolina Blasco. El plazo de ejecución de las obras será 4 meses y el presupuesto de la actuación 311.864,20 €, IVA incluido.
El Proyecto ha sido redactado por EIC ESTUDIO DE INGENIERÍA CIVIL, S.L., mediante equipo multidisciplinar de ingenieros civiles, forestales y agrónomos.
