El Ayuntamiento de Burgos pone en marcha la Campaña Escolar “Dame la Lata”
La concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Burgos, Carolina Blasco, ha presentado la campaña municipal “Dame la lata” destinada a los centros educativos para informar de lo que debe depositarse en el contenedor amarillo: latas de bebida y conserva, aerosoles, tapas metálicas, bricks y bandejas de corcho blanco y de plástico generadas por los burgaleses.
Según datos facilitados por ECOEMBES referidos a Castilla y León en 2015, un 11,8% de los castellanos y leoneses que tiene separación de residuos en su casa y no saben que las latas, de bebida o conserva, deben ir al contenedor amarillo. Un 25,9% no saben que a este contenedor deben ir también las tapas metálicas. Informar y concienciar para evitar la pérdida de estos recursos, es lo que motiva la campaña “DAME LA LATA”, que pone en marcha el Ayuntamiento de Burgos.
La campaña se desarrollará en los centros educativos, para informar de lo que debe depositarse en el contenedor amarillo: latas de bebida y conserva, aerosoles, tapas metálicas, bricks y bandejas de corcho blanco y de plástico generadas por los burgaleses, evitando así la pérdida de estos recursos.
Son objetivos de la campaña:
fomentar la recogida de dichos residuos
sensibilizar a toda la comunidad educativa de los beneficios del reciclaje fomentando a su vez el interés de los escolares por la naturaleza y lo que ésta nos aporta.
realizar actividades educativas en el medio ambiente y la horticultura
fomentar una alimentación sana, natural, limpia y ordenada.
Los colegios participantes recibirán unas cajas de cartón de 35 x 35 x 80 cm que irán llenando con sus envases metálicos. No deberán acumular los envases recogidos en su colegio; cuando la caja esté llena, avisarán a través de un correo electrónico, para su retirada, a esta dirección: eduambiental@aytoburgos.es.
Los colegios que más envases metálicos recojan (en proporción al número de alumnos con el que quieren participar) recibirán un huerto escolar.
Temporalidad de la campaña: de Septiembre a 20 de Diciembre de 2016.
Presupuesto: 26.000 € financiados por ECOEMBES (dentro del Convenio firmado con el Ayuntamiento de Burgos).
Características de los Huertos:
Tamaño del huerto: 4.8 m de largo; 1.6 m de ancho y 0.7 m de alto. Su altura permite el trabajo de algún alumno en silla de ruedas, Caja de aperos, para mantener nuestras herramientas limpias y ordenadas Aljibe para contener agua (les hace autónomos) ya que el aljibe o depósito de agua que recoge el agua de riego y de la lluvia.
Bomba manual para la extracción del agua y un cómodo fregadero, Riego natural por agua de lluvia o sacada del aljibe.
No es común disponer de un espacio de terreno apropiado para el cultivo y menos en las ciudades. Con estos huertos se ofrece una solución ordenada, limpia y autónoma de poder tener un huerto donde se quiera.
Destinados a la educación en colegios, estos huertos se amoldan a cualquier espacio del que dispone el colegio y se adapta al número de alumnos que lo usan. Permite realizar esta actividad incluso en colegios que están en el centro de las ciudades, que no tienen ningún terreno para plantar, pudiendo situarse en terrazas o áticos.
Estas instalaciones de huertos escolares, generan puntos verdes, vivos y educativos.
Cada huerto está formado por módulos unidos entre si, forman un gran recipiente que contienen:
En su parte abierta superior, la tierra de cultivo.
En su parte interior, un gran aljibe donde se deposita el agua de riego y lluvia, por filtrado del sustrato. Un fregadero, alimentado con agua del aljibe, para el riego, lavado y limpieza.
Un espacio privado, cerrado con tapa y llave, para el guardado de aperos, semillas, fertilizantes y objetos personales.
Una bomba manual junto al fregadero, complemento fundamental para la extracción de agua del aljibe.
Calidad de los materiales: POLIETILENO (PE-MD) primera materia, gama alimentaría RD510/196 EEC90/128, con colorantes en masa RAL 1019 según EN 71-3/98 y garantiza su estabilidad intemperie ultravioleta. Solo una materia prima, mono componente, y de gama alimentaria, por su nula toxicidad garantiza, el contacto con los alimentos y convierte la huerta, al final de su vida útil, en un producto 100% reciclable.